Conocí a Javier en un evento de Empresa Saludable en el 2015, y congeniamos en el acto. Más adelante me propuso que transmitiera todo lo que llevo aprendido, la teoría y la práctica, de empresa saludable a los alumnos del máster de RRHH de EAE Business School. Y desde entonces que vamos aproximando el bienestar a la empresa y sobre todo incidiendo en los nuevos directivos, aproximando el nuevo talento a este modelo de gestión más saludable y humano. Aquí os dejo sus palabras.
1. ¿Qué es para ti una empresa saludable?
Pues es una empresa inteligente y ética, ergo también más productiva. Que afronta mejor los restos del mercado. Lo demuestra la evidencia científica. Es una organización donde se cultiva y desarrolla el talento humano, donde todos comparten la misión de la compañía y donde sus personas participan en pro de mejorarla y, por consiguiente, aportan más valor al cliente. Una empresa saludable tiene una cultura organizacional y un clima laboral positivo.
Dice mucho de su dirección lograr crear efectivamente una organización saludable, en positivo claro.
2. ¿Son las empresas Saludables más Humanas?
Sí porque entienden a las personas más allá del rol de profesional, en otras dimensiones de la vida, como la familia con la conciliación, por ejemplo, o con el voluntariado solidario, etc. Las empresas han tomado conciencia de que, si su capital humano tiene bien ensambladas esas facetas de la vida, el rendimiento aumenta, porque la gente tiene las condiciones para el bienestar laboral y para mejorar día a día ocupándose de su trabajo y no preocupándose por temas ajenos al trabajo.
3. ¿Por qué es importante para las organizaciones pensar en este tipo de modelos de gestión justo ahora?
Porque el talento lo exige como condición para mantenerse fiel a la compañía. Ese talento es escaso y si no, se nos irá. Porque el talento crece y se desarrolla mejor en entornos saludables. Esos modelos de gestión generan ecosistemas positivos, innovadores y resilientes. Además, como decía anteriormente, una empresa saludable es más productiva y esto evidentemente, repercute en el negocio.
4. ¿Qué beneficios crees que aporta el modelo de empresa saludable en las organizaciones?
Además del puramente de mejora del negocio, la empresa mejora su marca de empleador y atrae mejor al talento. Optimiza sus inversiones en Talento y obtiene mayor retorno de esa inversión. La organización saludable tiene mejor reputación corporativa y ahí, el mercado responde con confianza en sus productos y servicios. También es una empresa menos conflictiva desde el punto de vista laboral por que las relaciones laborales son más de colaboración.
5. Las empresas deben buscar un equilibrio entre el desarrollo del negocio y el crecimiento de las personas ¿Cuál crees que es el principal freno de las empresas en este sentido?
El enunciado no es correcto, pues el desarrollo del negocio es, con y a través de las personas. Sin personas comprometidas, la empresa aumenta el control ahogando al talento y despilfarrando recursos en capítulos con bajo retorno. El principal freno somos la dirección, porque tenemos un sistema muy obtuso y cortoplacista de los resultados inmediatos, y se piensa que, recortando en personal y en recursos, ahorramos dinero. Y esto a medio plazo no es así, aumentando los costes por alto absentismo, ata rotación, mala reputación, etc..
6. ¿En qué punto se encuentran las empresas en actualidad?
Muchas siguen en modelos de pensamiento pre crisis y languidecen, otras están en ese proceso de cambio, algunas con horizonte más oscuro y otras, aunque con problemas, generando ilusión, innovando y confiando en su capital humano que es el único, junto con una dirección con amplias miras, que conseguirá mantenerse en el mercado y aportar al mismo innovación para salir adelante con éxito. Luego hay un grupo nada desdeñable de empresas que llevan mucho tiempo trabajando este paradigma saludable y he ahí su éxito. No sólo multinacionales y grandes empresas, sino también pymes y startups.
7. ¿Confías que la transformación de la empresa hacia una cultura saludable es posible?
Indiscutiblemente, lo que ocurre es que los procesos de trasformación son lentos y a distintas velocidades. Algunas empresas no lo conseguirán nunca, hasta que se retire su directiva y por lo tanto cambie su cultura. Otras empresas, insisto, llevan en su ADN esta cultura saludable por que han aprendido que solo en ese entorno el talento crece. La transformación de la empresa hacia una cultura saludable no solo es posible, sino que es una condición sine qua non para tener éxito en este difícil y entorno VUCA.
8. ¿Cuáles son los valores y principios éticos que debe tener una empresa en el nuevo paradigma?
Pues los del humanismo clásico de nuestra cultura. Creo que al capitalismo en general ha perdido el norte. Ha generado, junto con lo peor del ser humano, este entorno de corrupción y egoísmo exacerbado que no lleva a ningún sitio y que vive de espaldas a la sociedad. Los millennials no quieren trabajar en empresas donde solo se habla de resultados y donde día sí y día también se desvincula gente para equilibrar una décima la cuenta de resultados y llegar al 20% de beneficios. Me ha tocado vivir esta misma situación. Muy triste.
Orientados al negocio, por supuesto, pero con sentido, humanismo, transparencia, generando confianza y ética en las relaciones laborales.
9. ¿Cómo debe ser un “líder saludable”?
Orientado al desarrollo, al negocio y a generar ilusión, con una alta capacidad de relación y una verdadera fe en su equipo y en las personas de su organización. Debe ser LÍDER, con mayúsculas, lo que conlleva convicción ética y predicar con el ejemplo. Y sobre todo no debe ser obtuso de visión. Y por último añado, debe ser “Humano” 🙂