Hoy de nuevo en Humanas hablamos de dos temas que nos encantan: los valores y la igualdad.
Nuestro modelo de gestión por valores implica la oportunidad de atender a la ética, a la responsabilidad personal y empresarial, así como a la diversidad que requiere y demanda el equilibrio en género en los puestos de mando en las organizaciones en pro de la eficiencia y sostenibilidad.
En Humanas casi todo está en femenino, comenzando por nuestro nombre y nuestras socias. Y lo hacemos extensible a las empresas que acompañamos.
En Humanas creemos firmemente en la necesidad de incorporar el talento de la mujer en los altos puestos de las organizaciones. Así, desde este año 2019 nos hemos incorporado a la Asociación Española de Ejecutiv@s y Consejer@s EJE&CON. Lo hicimos porque en nuestro ADN trabajar por garantizar la diversidad, la competitividad y la sostenibilidad en las empresas que confíen en nosotras.
En este artículo nos hacemos eco de las conclusiones del Informe sobre Buenas prácticas para la gestión del talento y la mejora de la competitividad en la empresa, aprovechando para argumentar nuestra visión y misión, nuestros valores.
En Humanas apostamos por hacer más partícipes de las decisiones empresariales a todo el tejido empresarial femenino, siendo muy conscientes de que la relación riesgo-prudencia que implica el carácter ying de los miembros de la alta dirección en la empresa conlleva a decisiones más conscientes, sostenibles y humanas.
Mujeres en alta dirección
Un dato clave en esta exposición: 3 de cada 4 empresas que han promovido la presencia de mujeres en cargos directivos registraron un aumento de sus beneficios del 5% al 20%, según un análisis realizado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) a partir de encuestas a 13.000 compañías de 70 países.
En el momento actual, en el que la tasa de participación laboral femenina es ya del 70% (venimos en tendencia positiva desde 1900 cuyo dato era del 42,2%), quedarse fuera de esta tendencia supone ya una pérdida de oportunidad.
Los datos son incuestionables. El 61% de la población con estudios universitarios es mujer. Sin embargo, trabajar por la igualdad en los puestos de responsabilidad sigue siendo necesario: tan solo un 10% de las empresas tienen entorno al 30% de mujeres en la Alta Dirección.
Tenemos que tener en cuenta que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) recomendó en 2015 una cuota del 30% de mujeres en los Consejos de Administración para el año 2030. Por su parte, la Comisión Europea en 2012 recomendó que este porcentaje fuera del 40%.
¿Y por qué este empeño en aumentar el número de mujeres en los Consejos de Administración y en los Comités de Alta Dirección?
Si apostamos por empresas sostenibles y empresas con valores, precisamos una Cultura de la Organización que emane de estos valores, centrada en los empleados y en alinear las expectativas y valores de estos con los de la organización.
Líderes transformadores
Definir esta Cultura Empresarial, como la voz y esencia del para qué existe esta empresa, solo se puede conseguir a través de Líderes Transformacionales. Son los líderes capaces de definir una nueva visión, capaces de revisar los conocimientos, las experiencias adquiridas y transformarlas en prácticas empresariales que engloben a toda la organización.
Estos líderes deben ser hombres y mujeres, equipos diversos, capaces de poner en marcha políticas específicas de igualdad, de diversidad, de trabajo flexible, de igualdad de retribución, etc.
Estos líderes deben desplegar estas políticas en prácticas saludables como son: igualdad de oportunidades laborales, corresponsabilidad, flexibilidad horaria, uso no sexista del lenguaje, transversalidad del género, formación y sensibilización hacia la igualdad. Más allá de la igualdad, también deben apoyar acciones como el cambio de métodos de trabajo, primando la eficacia y los resultados basados en valores, y superar los resultados basados en la presencia, al acompañamiento sin valor.
Estos líderes deberán terminar con el fatherhood premium y el motherhood penalty y, sobre todo, deberán primar a la responsabilidad personal en pro de obtener el mayor rendimiento de sus equipos en la jornada laboral.
Cómo romper los techos de cemento de las mujeres
Los estudios nos llevan a detectar un fuerte techo de cristal y techo de cemento. Este es aquel autoimpuesto por las mujeres que deciden no promocionar debido al elevado coste personal y familiar que supone acceder a dicho puesto. Es necesario romper con estos techos y para ello es necesario trabajar en muchos aspectos.
Por una parte, con programas de coaching y mentoring para las mujeres, con el objetivo de romper el techo de cemento que se crea con la baja autoestima, con la falta de alicientes en los puestos de máxima responsabilidad, con la dificultad del networking masculino o con el machismo de la sociedad.
Por otra parte, con la formación e información de las compañías para normalizar la práctica de recogida del valor femenino en la organización. Por ejemplo, con mecanismos que promuevan la presencia femenina en los procesos de selección mediante la incorporación de los candidatos, discriminación positiva del género menos representado y, finalmente, con currículum ciego.
Instauradas estas políticas y prácticas en la organización, las mujeres podrán desarrollar todo su potencial y ponerlo a disposición de las empresas.
Serán ellas mismas quienes ejerzan como agentes de cambio para crear una nueva visión empresarial. Una visión en la que se aúne los máximos resultados económicos empresariales con un crecimiento personal que potencie la responsabilidad en la sociedad de sus empleados, generando impacto positivo en la sociedad.
Aprovecha al máximo el potencial de tus líderes y fórmalos para llevar a tu organización a las más altas cuotas de sostenibilidad. Crea valor en tus equipos, crea humanidad.
En Humanas Salud Organizacional te aclaramos todos estos conceptos, te ayudamos a analizar la situación de tu empresa en cuanto a igualdad y a diversidad. Por supuesto, te acompañamos en la preparación de un plan de acción y en el despliegue del mismo.
Te reforzamos en tu visión consciente, humana y saludable de tu negocio.
Begoña Sánchez Aguadero – Experta en la integración de la Salud Organizacional en los Procesos de Gestión de las Empresas