Hoy en día en nuestras empresas tenemos la necesidad de ser innovadores. Muchos de los problemas que se generan en el día a día de nuestras organizaciones se solucionarían construyendo empresas más innovadoras. Sí, lo sé, es más fácil decirlo que poner en acción lo que acabo de comentar, sobre todo si no somos avezados de ver que la capacidad de Innovación está más relacionada con la Salud las personas que nunca. Esta afirmación sigue siendo difícil de ver para muchas organizaciones, será por eso que todavía despierta más interés el término «Big Data» que el de «Empresas Saludables».
En este post voy a entrar a valorar si “la captura y procesamiento de ingentes cantidades de datos procedentes de la red” es más relevante que “la salud de las personas”, solo me gustaría mostrarte que es muy importante convertir ideas en realidades cuando los recursos escasean y que la única manera de conseguirlo es poner a las personas en el centro de nuestras estrategias. Apostar por las personas es la solución, pero todavía son pocas las empresas que tienen la destreza de ver la aguja en el pajar.
Cada día recibimos tal cantidad de información que resulta imposible de asimilar. La información nos satura, y lo hace de tal manera que algunos vocablos se ponen de moda extremadamente rápido y casi sin explicación las empresas creen haber encontrado la solución a sus problemas. No voy a ser yo el que trate de convencerte sobre si debes apostarlo todo a la ficha roja o a la ficha negra, pero lo que si has de saber es que las empresas más innovadoras suelen ser aquellas que apuestan por las personas y no por los trabajadores, y créeme, no es casualidad.
Promoción de la Salud en el Trabajo, ¿Coste o Inversión?
Seguramente tú también has notado que a medida que crece tu organización disponéis de menos personas para realizar vuestro trabajo. Los departamentos no crecen en la misma medida que el volumen de vuestra capacidad de negocio. Esto es algo que nunca he podido llegar a entender del todo bien, cuando esto pasa en las empresas doy por hecho que los comités de dirección no creen en el talento de sus equipos y únicamente se centran en los beneficios a final de año.
Hoy en día pocas compañías se paran a analizar el gasto que generan los accidentes de trabajo, cuánto cuesta absentismo laboral en sus centros de trabajo y mucho menos porqué se eleva cada día el nivel de presentismo. Las empresas han adquirido tal tamaño que la comunicación dentro de un mismo departamento ha dejado de fluir. No lo percibimos al momento, pero si lo observamos con perspectiva es fácil darse cuenta que palabras como colaboración o cooperación han quedado en el olvido y esto hace que mantener nuestra productividad a niveles elevados sea mucho más difícil. Esta es una de las mayores dificultades que nos encontramos en las organizaciones, no existe esa visión integral de la gestión de la salud organizacional. Cada actor implicado se limita a tratar la información que maneja sin pensar más allá de su función.
Por ejemplo, si observamos un Dpto. de Recursos Humanos veremos que en el área de Gestión de Personas se hace un uso poco efectivo de datos como los índices de rotación y absentismo, % de retención de personal clave o no saque el máximo partido a los datos obtenidos de las evaluaciones de Clima Laboral. Por otro lado, el área de PRL maneja datos de suma importancia como pueden ser el índices de accidentalidad o los incidentes laborales, el grado de conocimiento de cada persona de los riesgos existentes en su área de acción y los datos obtenidos de su colaboración necesaria con las Mutuas y Servicios de Vigilancia de la Salud (datos sobre la salud de las personas, datos epidemiológicos, tendencias del sector,…). Evidentemente hay muchos más KPI´s en la gestión de personas, pero de analizar solo los que acabo de mencionar podríamos tener una idea del estado de salud de nuestras empresas y las personas que las componen. La realidad es que esto no suele pasar con frecuencia.
No analizar los datos hace que las empresas nunca lleguen a tener una visión global, cuando la información solo se utiliza de manera reactiva termina por caer en el olvido. Como dice Patrick Lencioni en una de sus publicaciones “Muchos líderes prefieren buscar respuestas donde hay más luz, donde se sienten más cómodos”. Es difícil cuantificar los beneficios reales de convertirse en una Organización Saludable, no porque no existan sino porque la salud influye en muchísimos aspectos de la empresa que hacen complicado medir cuales son las cifras exactas del ROI, pero no por eso la salud debe pasar a un segundo plano.
Invertir en Salud para ser Innovadores y Sostenibles
He de decirte que si tus equipos de trabajo están compuestos de personas desmotivadas, por mucho dinero que inviertas en buscar la innovación en tu organización no conseguirás los resultados que buscas. Si a esto le sumamos que las partidas presupuestarias dedicadas a la innovación escasean, tiene menos sentido aún olvidarse del talento. El talento quiere ser escuchado y que le permitan arriesgarse, las personas son el factor más importante de las organizaciones, ellas constituyen la única ventaja competitiva sostenible en el tiempo.
Silvia Leal, experta en Inno-Liderazgo, no dice que “La innovación en las empresas es el resultado de la combustión de tres elementos: Organización + Personas + Motivación”. Los departamentos de Recursos Humanos al completo, no cada área por su lado, deben ser los agentes del cambio en las organizaciones, deben alinear a las personas para convertirlas en una fuente de ventaja competitiva.
La ENWHP ha demostrado, a nivel general, la rentabilidad de la promoción de la salud en el trabajo para las empresas. Ahora es el turno de cada organización a nivel individual, debemos demostrar que la Promoción de la Salud mejora el ambiente laboral y que además resulta beneficioso para las empresas, trabajadores y sociedad. Debemos perder el miedo a cuantificar, ahí está la clave para poder poner en valor la PST. Siempre pensamos que cuantificar no quitará mucho tiempo y esta afirmación no es del todo correcta, tenemos un concepto equivocado. Cuantificar nos permitirá hacer muchas más cosas porque estaremos optimizando nuestro rendimiento y eso nos acercará un poco más a esas deseada Sostenibilidad.
«Mide lo que se pueda medir; y lo que no, hazlo medible» Galileo Galilei
¿Dónde empieza la prevención de verdad?
La prevención de verdad empieza por cada persona de la organización. Las personas deben ver que la prevención es buena para su propia salud y es nuestro papel demostrárselo. Si consigues que las personas se enganchen a tu “Proyecto Saludable” tendrás mucho camino andado. Cuando lo consigas será el momento de dar otro paso más, buscar aliados estratégicos en los miembros del comité de dirección. Ellos deben reconocer e integrar como propia la responsabilidad de generar una cultura saludable.
En Humanas tratamos en todo momento de dar sentido a lo que hacemos, no pretendemos aportar soluciones a un problema imaginario sino a un problema real que hemos experimentado de primera mano. Queremos ayudaros a hacer de la Prevención una nueva estrategia de Producción y a poner en valor la Salud de tu empresa.
¿Quieres que te ayudemos a ser una Empresa Saludable?
Javi Martínez. Gestor Identidad Digital Humanas Salud Organizacional
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2 comentarios
Efectivamente hay mucha verdad en tus palabras. En mi última empresa lo primero era la seguridad, las personas. Cada vez que se daba algún tipo de incidente o accidente venía detrás una exhaustiva investigación de las causas y la realización de varias acciones preventivas para que no volviera a repetirse.
Debería ser política de toda empresa, porque sin capital humano no pueden funcionar de forma efectiva.
Saludos!
Excelente información